domingo, 31 de diciembre de 2017

DESEOS DE AÑO NUEVO



Este es el momento idóneo para desear todo lo mejor para ese año que comienza en unas cuantas horas. A unos primero les da por hacer balance de lo ocurrido en el 2017 y claro, hay un poco de todo. Cuando lo bueno se ha dado más veces que lo malo surge una media sonrisa en la cara y piensas "pues que sigamos así" Por el contrario, si han existido momentos desagradables, duros o dolorosos, estamos deseando cruzar la línea como si de un corredor de los 100 metros lisos se tratase.

Es hora de hacer la lista de deseos propios y ajenos. Y digo deseos porque como hagamos promesas, señores siento decirlo, seguro que acabamos estropeándolo. En estos días vas leyendo cosas como "amigos para siempre" "siempre me tendrás" "nunca te dejaré sola" y claro, que siempre y  nunca son palabras que a veces nos queman entre las manos.

Y si hablamos de propósitos mejor echamos la mirada hacia otro lado. Porque ya no me refiero a ir al gimnasio o estudiar algún idioma. Es que existen casos en los que nos ponemos propósitos muy frustrantes. "No voy a esperar nada de nadie y así no me decepcionarán" "Voy a pasar de la opinión de los demás y seré feliz siendo yo misma" "No hace falta que me quieran que ya me quiero yo mucho" "Nada va a estropearme este año". Entonces es el momento adecuado para que te entre la tos o te atragantes un poco para dejar de decir tanta tontería.

Por eso yo hablo de DESEOS.

- Deseo que seáis felices, pero no una felicidad superficial de brindis por aquí y por allá.
  • Felices por dormir por las noches tras el bien hecho, o habiéndolo intentado.
  • Felices porque hay, al menos, un ser humano que nos quiere de verdad, con AMOR del bueno.
  • Felices por tener sueños que nos hacen mantener viva la esperanza de merecernos algo mejor.
  • Felices porque siempre habrá una opinión que realmente nos importe.
  • Felices porque no nos gusta estar solos, porque no nacimos para ello.
Y cuando lleguen los momentos difíciles, que los hay, cuando nos duelan las cosas, que nos dolerán, recordemos que somos felices.
  • Felices porque nosotros también nos equivocamos y nos perdonaron.
  • Felices porque dimos nuestra opinión y alguien nos dio las gracias.
  • Felices porque, aunque algunos ya se fueron, sigue habiendo vidas nuevas que cuidar.
Por todo ello deseo que en el 2018 podamos reírnos al menos una vez al día, es de las mejores cosas que me han pasado a mí este año, os lo aseguro. Deseo que sanemos algunas heridas que aún nos duelen, algunas tardan más y otras menos, pero cuando cicatrizan nos hacen ver que somos capaces de muchas cosas. Y que queramos mucho, que no nos reservemos eso que haga que, entre el cielo y la tierra, haya muchas otras personas felices.

martes, 15 de agosto de 2017

ESTAR A GUSTO




El sábado se casó mi hermano, y bueno, me tocó dedicarle algunas palabras que hoy comparto. Porque no hay nada mejor que retomar este proyecto que hablando de AMOR.


Hace un par de semanas el testigo me escribió para ponernos de acuerdo sobre cómo hacer esto de “decir unas palabras”. Yo le planteé que lo más fácil sería que él escribiera sobre la novia y que yo lo haría sobre el novio, que para eso es mi hermano. Entonces me dijo algo así como, “vale, voy a ver como les hago comprender que ella  quiera casarse con alguien como él”.

Y bueno, aunque haya alguna que otra razón que yo no pueda expresar, creo que básicamente lo hace por amor, y el amor no se razona ni se explica ni se justifica. Hay mil formas de querer, y ahí de aquel que intente decir que hay alguna que no es válida. Que cada una, entre amigos, hermanos, familia y pareja nos sorprende y nos hace conocernos mejor. Porque para saberlo todo de ti mismo no hay nada como dejarse mirar por alguien que te quiere de verdad. Porque, a quien de los presentes no les han dicho alguna vez, si te conoceré yo…y sobre todo las madres cuando nos dicen “como que te he parido”.

Encontrar a esa persona que te ayuda a ser tú mismo, porque oye, no siempre resulta tan fácil como parece. Hay montones de canciones o poemas que hablan del amor, pero si le quitamos todos esos adornos, creo que el amor no es más ni menos que estar a gusto con alguien, muy a gusto. Y con mi hermano es bastante fácil sentirse así. Os lo digo yo, que hasta compartí el vientre de nuestra madre. 

Él que lo hace todo sencillo, espontaneo hasta la sorpresa, y divertido hasta que a uno le duele la barriga. Porque si uno puede hacer algo con mi hermano es reírse y mucho. 
Lo deja todo para el último momento y se piensa las cosas mil millones de veces. Sincero como los niños, honesto y muy fiel, se pone muy nervioso cuando tiene que mentir y cuando alguna verdad a medias pueda suponerle daño a otra persona. 
 
Mi hermano y mi mejor amigo, porque si a la familia te la dan y a los amigos los elijes, yo tengo la suerte de tenerlo todo en el mismo pack. Con quien puedo contar siempre porque jamás ha tenido excusas o un no para mí. Lo mismo me pidió que hoy dijera algo porque sabe que con él no puedo negarme aunque me pueda la vergüenza, porque entre los dos no hay negativas.
El mejor guardando secretos y diciendo “no te agobies por eso” aunque él lo haga hasta cuando le duele el dedo pequeño del pie. El que levantando una ceja o una leve patadita debajo de la mesa te avisa que la va a liar, porque otra cosa que se le da de lujo es provocar que los demás se cabreen.

Cuando una pareja lleva tanto tiempo junta, compartiendo promesas cumplidas y deseos que se van haciendo realidad, es bastante complicado decirles eso de que os vaya muy bien en vuestra nueva vida, que el compromiso que asumís hoy os dure para siempre. Porque si algo saber hacer esta pareja es estar comprometida. No dejar que la rutina les arruine lo extraordinario que tienen.

Ellos no celebran un cambio de vida, sino que comparten y festejan que, a pesar de los momentos difíciles, ellos deciden estar y seguir juntos.  En todas las relaciones hay momentos en los que uno pones más y en los que uno siente que el otro pone menos. Pero hay momentos mágicos en los que la balanza se equilibra. Y son esos instantes los que hacen que uno apueste y se la juegue. Cuando lo apuestas todo, cuando no te reservas nada, cuando eliges amar para ser feliz, hace que uno celebre no conformarse con menos. Y es genial cuando puedes celebrar que lo tienes todo, que has encontrado y te has dejado encontrar por esa persona que te hace estar y sentirte muy a gusto.





martes, 24 de enero de 2017

POESIA






¡Qué fácil resulta a veces olvidar la importancia que algunas cosas tienen en nuestra vida!.¡Cómo desechamos casi sin darnos cuenta aquello que creemos que resulta inútil!. ¡Qué fácil resulta arrastrarnos por este mundo "loco" que sigue atropellando a todo aquel que no siga su ritmo!
Como bien decía la canción, "no son buenos tiempos para la lírica"... Y lo peor es que llevamos muchos años, demasiados diría  yo, en los que despreciamos las humanidades, no valoramos la creatividad artística de nuestros escritores y seguimos viendo a los poetas como si fuesen figuras de otro tiempo que no conectan con nuestra realidad.
A diario me enfrento con el apasionante reto de poder poner un atisbo de luz sobre poesía y poetas más importantes de nuestra literatura a nuestros jóvenes y en un buen numero de ocasiones termino sorprendido cómo pueden conectar con su temática y su forma, con su reinvidicaciones y sus expresiones de sentimientos y emociones.
La literatura no tiene fronteras, la poesía es universal y atemporal y, como no, necesaria para poder detenernos aunque sea un instante en nuestra acelerada vida y poder simplemente disfrutarla. La poesía no entiende de prisas, entiende de valores y símbolos para descubrir, de bellos mensajes engarzados en lenguajes figurados, entiende de belleza y de dolor, de nostalgia y pasión. La poesía debe paladearse, sacarle su mejor jugo y apreciarlo envuelto en nuestros pensamientos y vivencias. La poesía nos descubre vida, nos presenta experiencias, nos adelanta sueños e ilusiones sin esperar impacientes un final porque éste simplemente se lo pones tú.
Sigamos aprendiendo de ellos, de los grandes poetas, de sus grandes obras; ahora olvidados pero no por ello importantes. Detengámosnos ante un poema, como si de una terapia se tratara, descubramos su esencia para calmar nuestra agitada alma. Para que luego digan que la literatura no es necesaria...

Juan Ruiz